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Las cubiertas microventiladas de teja cerámica mejoran el confort, reducen pérdidas energéticas y permiten diseños duraderos, eficientes y de instalación rápida.
En el sector de la construcción, y bajo el marco de la normativa de eficiencia energética, Hispalyt resalta el valor de las cubiertas ventiladas de teja cerámica para Edificios de Consumo Energético Casi Nulo (EECN). Estas soluciones, dotadas de microventilación bajo teja, ofrecen un excelente comportamiento térmico, reducen los gastos energéticos del edificio y permiten un montaje rápido en seco con mínimo mantenimiento y alta durabilidad.
Según Alfred Vincent, presidente de la Sección Tejas de Hispalyt, entre el 25% y el 30% de las pérdidas energéticas de un edificio se producen por la cubierta, por lo que su diseño e aislamiento influyen de forma determinante en el rendimiento térmico global.
La microventilación se genera por la entrada de aire en aleros y limahoyas y su salida por cumbrera y limatesas. En verano, el aire caliente asciende por convección y refresca la cubierta; en invierno, contribuye a evacuar la humedad, evitando condensaciones y problemas de heladicidad. A diferencia de las cubiertas tradicionales, estas cubiertas “evitan el sobrecalentamiento en verano y mantienen el calor en invierno, garantizando confort y reduciendo el impacto ambiental”, señala Vincent.
En España, más del 80% del parque residencial se sitúa en las categorías energéticas más bajas (E, F, G). La Directiva Europea de Eficiencia Energética exige reducir el consumo un 16% para 2030 y un 20% para 2035, un objetivo que demanda soluciones constructivas de alto rendimiento. Vincent enfatiza que la eficiencia energética “es una prioridad en Europa” y que España requiere medidas urgentes para adaptarse al cambio climático. Mientras en Europa estas cubiertas llevan años implantadas, en España su uso es más reciente, pero con resultados muy favorables.
Entre las ventajas más valoradas por los profesionales destacan:
En estas cubiertas, el mortero se sustituye por sistemas de fijación como tornillos, clips, ganchos, grapas o adhesivos, instalados sobre soportes discontinuos (rastreles) o continuos (paneles aislantes, placas onduladas). Estos materiales, suministrados por los fabricantes, deben garantizar su funcionalidad a lo largo del tiempo.
Los fabricantes de teja cerámica también impulsan sistemas integrados orientados a la eficiencia, como las cubiertas fotovoltaicas cerámicas. Según Vincent, las soluciones actuales permiten diseñar cubiertas ventiladas que cumplen estándares como Passivhaus, especialmente adecuadas en rehabilitación energética por su combinación de durabilidad, confort interior, bajo impacto climático y respeto patrimonial.
En el ámbito arquitectónico, las tejas cerámicas se adaptan a la arquitectura contemporánea con múltiples formas, colores, texturas y tamaños, ofreciendo un amplio abanico de opciones para personalizar proyectos y responder a las necesidades de arquitectos y prescriptores.
